8.07.2009

Anegdotario - con J.C Ribas


¿Le parece bien robarle el laburo a Saralegui? Mire que eso es muy feo?

Tengo sentimientos encontrados. Siempre duele, como me ha pasado a mí, cuando un entrenador no puede seguir trabajando. Increíblemente, se da por esa contradicción de la vida y por el sentimiento de la directiva por Saralegui, como ha sucedido antes.

¿Como que antes, le robo el trabajo a otra gente?

Garisto, Morena, Matosas, que son glorias del club. Pero, a pesar de esa contradicción, como profesional, siento una gran satisfacción. Pero más que una gran responsabilidad, esta es una oportunidad de gloria. Y yo siempre soñé con esas cosas en todos los lugares donde estuve, y no solo en el fútbol uruguayo.

¿Le dijeron que las formativas toman agua de poso y todas las categorias entrenan con la misma camiseta?

- Solo en los grandes lugares del mundo lo encontrás en los grandes equipos. He tenido la posibilidad de dirigir en tres continentes: America, Italia y esteeee como es que se llama....bue, lo digo humildemente, en América, en Asia y en Europa. Este es un proyecto maravilloso que por circunstancias de la vida me dan la oportunidad de defenderlo y lo voy a hacer con toda mi alma. Es muy bueno y no solo para Peñarol, sino para todo el fútbol uruguayo.

¿Sabe que vienen comiendo como loco con Nacional?

Más allá de todos lo momentos tristes que se pueden tener, y que yo siempre pienso que son circunstanciales porque la vida tiene eso de maravilloso, el camino en la vida siempre es duro. Pero lo lindo del camino cuando es duro, es que solo los duros lo caminan. Y nosotros tenemos bien en claro cómo transitar ese camino. Por eso estoy tremendamente agradecido y orgulloso de que me haya tocado estar de vuelta por un grupo de dirigentes que según lo veo y lo palpo hay una cohesión muy grande entre ellos, más allá de las diferencias que siempre se pueden tener. Acá hay un pensamiento único y filosófico por la grandeza de Peñarol.

¿Y quien lo llamo? Fue Damiani?

Hoy nos llama la gran historia de Peñarol. Todos los que queremos la grandeza de Peñarol tenemos que estar unidos, porque es imposible llegar a grandes cosas si no estás unido. Aunque soy un gran creyente no le pido nada a Dios porque sé que voy a estar a la altura de lo que se necesita para transitar este camino. Así lo exige la grandeza de Peñarol. Peñarol se va a levantar una vez más como lo hizo siempre en su historia.


¿ Sabe que Cavallero dijo luego de su alejamiento que no se gana con agua bendita, collares e inciensos y diciendoles a los jugadores que son los mejores ?

Esperaremos el momento en que todos juntos podamos mirarnos y decir: la leyenda continúa.

-El partido frente a Independiente está a la vuelta de la esquina, saben que van a comer no?

-Sí, y aunque ahora lo más inmediato es el partido frente a Atlético Mineiro, lo más importante para nosotros es ese partido para clasificar a la Libertadores. No tenemos mucho tiempo, tenemos que trabajar sobre eso y no se trata solo de entrar a una cancha y mover a un equipo sino que pasa por otras coordenadas que son las realmente importantes para nosotros y que van a lo filosófico, a lo emocional y a lo espiritual.

-¿Sabe que el plantel parece un cementerio de Dinosaurios? Les falta traer a Cesaro nomás y cartón lleno.

-Es verdad, Peñarol cuenta con gran plantel. A Darío Rodríguez, el único técnico que lo dirigió durante diez años en Uruguay fui yo: en Sud América y en Bella Vista y en Peñarol. Y tengo en mi casa una foto del primer gol que hizo Carlos Bueno, cuando lo hice debutar en Primera División frente a Rentistas. La tengo colgada en la pared porque tengo un recuerdo imborrable de aquel muchacho joven que vino de Artigas. Pacheco, Franco, ni hablar. Cuando fui con Venezia a jugar a Torino, me estaba esperando Franco. "Petete" Correa debutó jugando conmigo al lado en River Plate. Y hay otros muchachos muy valiosos. En este momento las cosas pasan por recuperar, si es que en algún momento no estuvieron, los mejores valores de cada uno de ellos y el encargado de hacerlo soy yo. Voy a intentar lograr el mejor rendimiento de los jugadores que están acá. Sé que cuento con jugadores que tienen nivel y estoy más que contento, feliz por eso. He vivido cosas inolvidables con Peñarol, como cuando me llamó el contador Damiani y me mostró un montón de cartas donde pedían que me echara.

¿Se acuerda como lo querian matar?

Hacía solo tres meses que estaba en el club. `No lo quiere nadie`, me dijo. `Pero no se preocupe no es moneda de oro para que lo quiera todo el mundo. Trabaje tranquilo y salga campeón que el balance se hace al final`.

¿Y por lo menos algo llegaste a ganar?

Lo recuerdo siempre y fue con los mismos jugadores que terminamos octavos en el Apertura y después fuimos campeones. Peñarol ha pasado muchas veces por estos momentos. pero lo que lo ha hecho diferente a nivel local e internacional es recuperarse de esos momentos. Y hoy se puede, está en la voluntad de cada uno.