8.13.2009

Memoria, eso es lo que hay que tener...Memoria



lunes 20 de julio de 2009
Julio Ríos: Un grosero operador del periodismo deportivo uruguayo
Por Víctor Hugo Castro

En el fútbol, como en la política, los medios de comunicación cumplen un rol fundamental, no en vano quienes llegan al poder lo primero que intentan es adquirir los grandes medios de comunicación. En este país abundan los ejemplos de ello, políticos dueños de cantidades importantes de medios que luego son utilizados para operar para determinado sector. En el fútbol pasó lo mismo. El poder del fútbol, que todos sabemos donde está, ha copado los medios deportivos más importantes. Los periodistas independientes son contados con los dedos de la mano y solo pueden aparecer en medios ubicados a los costados de dial
También en el fútbol se opera, en algunos caso con sutileza, lo que habla de inteligencia en definitiva, sin embargo, hay casos donde no existe límite algunos. El abanderado en este último caso es sin dudas Julio Ríos
El tema de la denuncia de Peñarol ante la AUF reclamando por el código Cañete, donde 14 y 2 son 17, puso en evidencia al periodista multi medios. Fue un defensor asérrimo de una denuncia vergonzosa, pero además, argumentó en base a lo sucedido con Nacional anteriormente, que él entendió que estuvo pésimamente resuelto a favor de los tricolores, no obstante, pretendió que como antes se hicieron las cosas mal ahora había que actuar de la misma manera. Ya con eso solamente da para desacreditar totalmente la opinión de este operador mediático deportivo.
Hizo punta en la denuncia de Peñarol, fue al frente sin dudarlo con su programa, de mucha audiencia por cierto, defendiendo la causa de Peñarol, que es la misma que tiene el poder empresarial del fútbol, empresarios que son los mismos que le pagan el sueldo.
Primero dijo que el fallo era para Peñarol, por las dudas, dijo nombre, apellido y trabajo de quien supuestamente tenía el voto que decidiría la contienda en el Tribunal de Apelaciones de la AUF. Dijo, nombre, apellido, lugar donde trabajaba, todo, cosa de poner en evidencia que si algo pasaba ya sabían quien era el responsable. Todo el menjunje de la AUF terminó en que Apelaciones pasó el tema a contiendas: primera gran derrota de Ríos en el tema, su presión a favor de Peñarol no surtía efecto.
Cuando el Ejecutivo de la AUF encabezado por Washington Rivero –Ríos hizo campaña por Abulafia y perdió- determina, apelando a los reglamentos, que la liguilla había que sortearla aunque no estuviera el fallo del Tribunal de Contiendas, Ríos en “Las Voces del Fútbol” lo comienza a matar a Rivero, diciendo que el Ejecutivo había tomado una decisión política, sin mencionar que lo hecho por el Ejecutivo de AUF se ajustaba a reglamento totalmente. Ya adelantaba Ríos que si se sorteaba la liguilla era derrota política de Peñarol y que el Ejecutivo resolvía políticamente el tema. Indudablemente Ríos presentía que el equipo al cual defendía marchaba y comenzaba a maquinar todo para defenestrar a Rivero, Presidente de AUF. Cuando el Tribunal de Contiendas y por 5 a 0 determina que Peñarol no tiene razón en el reclamo, Julio Ríos explotó, dijo que se trataba de una ostentación de poder de Nacional y que Peñarol iba por la cabeza de Ache y Navascuéz y que tenía el apoyo de varios clubes, incluso para que Washington Rivero dejara de ser presidente de AUF. Por la mañana Da Silveira dijo en la misma radio que Rivero tenía el apoyo de 14 clubes y que Peñarol estaba absolutamente solo en todo este asunto. Ríos por la tarde, tratando desesperadamente de torcer una realidad que rompe los ojos, la emprendió esta vez contra Nacional, club antagonista al cual defiende a muerte en estos últimos tiempos, luego de que se solucionara el diferendo entre los aurinegros y Casal y cosa que no hacía antes cuando Peñarol estaba contra Casal.
Pero la última del Periodista Julio Ríos es aún más asqueante. En el informativo de VTV del domingo, ensució a Washington Rivero diciendo que no se iba de la AUF porque gana 5000 dólares y tiene otros viáticos, obviando señalar que no se va porque Rivero tiene el apoyo de 14 de los 15 clubes que juegan en la AUF, según lo dicho por Da Silveira el viernes por la mañana.
Julio Ríos no se si es periodista, lo que si se es que actúa como operador y demuestra que no tiene escrúpulos, juega a cara descubierta, aunque a veces rodea la cosa para disimular. Julio Ríos le hace mucho mal al periodismo deportivo de este país, y también al fútbol sin dudas. Es justamente uno de los tantos responsables de la decadencia del periodismo deportivo, plagado de operadores del poder, los cuales pululan en los principales medios de comunicación de este país.